El gas licuado del petróleo (GLP) es una energía eficiente y versátil, que además ayuda a las empresas en sus retos medioambientales gracias a sus bajas emisiones. Enfrentar los desafíos del cambio climático y de la descarbonización de la economía es, hoy más que nunca, una prioridad para muchas compañías. Para que estas puedan alcanzar sus objetivos medioambientales, Repsol pone a su disposición el GLP, un combustible alternativo que se caracteriza por su alta eficiencia, competitividad y bajas emisiones.
En el camino hacia la transición energética, Repsol se ha convertido en el aliado perfecto para un gran número de empresas, entre ellas del sector de automoción. Así, pone a su disposición un tipo de energía que destaca por su eficiencia y versatilidad: el GLP, gas licuado del petróleo. Este tipo de combustible cuenta con un poder calorífico capaz de ajustarse a las exigencias de los equipos industriales, prolongando así su vida útil. Además, ayuda a mejorar la huella ambiental de los negocios por sus bajas emisiones y por no generar residuos.
Beneficios que se notan
Una de las ventajas del gas propano de Repsol es que reduce los costes de suministro hasta el 20%, así como los de mantenimiento y mejora la huella medioambiental debido a sus bajas emisiones . Además, ofrece otro tipo de beneficios como, por ejemplo:
- Disminución del tiempo de alcance de temperatura y del consumo eléctrico.
- Reducción de la emisión de contaminantes SO2, NOx, CO y partículas, principales causantes del efecto invernadero, favoreciendo así que las compañías se adapten a la normativa existente.
- Menos olores, en el caso de utilizar combustibles tipo fuel.
- Supone una fuente de energía en reserva que garantiza el suministro ante las interrupciones de las instalaciones solares o eólicas.
- Se puede adquirir tanto envasado como a granel.
Gracias a estas ventajas, el gas propano de Repsol asegura la calidad de los productos, lo que, sin duda, supone una ventaja competitiva para las compañías. Una solución idónea para alcanza un valor diferencial. El proceso hacia la incorporación de este tipo de energía es cómodo y sencillo. De hecho, Repsol se encarga de realizar un estudio gratuito personalizado de las necesidades energéticas que va desde la construcción de la instalación hasta la puesta en marcha y mantenimiento de esta. A este estudio se le suman soluciones llave en mano, una financiación de hasta 12 meses sin intereses y unas condiciones comerciales únicas.
Repsol ofrece soluciones de instalación y mantenimiento, tanto para bombona como para depósito a granel. Asimismo, el servicio ofrecido por Repsol proporciona un suministro continuo y sin interrupciones, llegando a donde quiera que esté el negocio, así como un asesoramiento y asistencia técnica gratuita 24 horas para la total tranquilidad del usuario. Finalmente, cabe destacar que la compañía cuenta con una red comercial y logística propia, lo que le permite estar cerca de sus clientes en todo momento.